No sé por qué te estoy escribiendo, ni siquiera por qué te tiendo una mano sabiendo que la vas a morder, no sé qué me empuja a dirigirme a ti, ni por qué lo intento sabiendo que desaparecerás de mi vida como entraste, no sé de dónde viene este impulso ni por qué el destino nos unió, no sé si tuvimos una vida pasada juntos y por eso parece que te conozca de siempre, que conozca tu alma, no sé por qué lo hago sabiendo que quizás me odies. No lo sé… pero estoy aquí escribiéndote con el corazón encogido intuyendo tu explosión de furia o de tristeza, que quizás rompa el débil lazo, pero aún así una fuerza me empuja a intentar que realmente vivas.
A veces te observo y veo una gran sonrisa preciosa y embrujadora que parece gritar soy libre, soy malo, soy peligroso. Esa sonrisa que sin duda hechiza a muchas personas, que las arrastra como la luz arrastra a las polillas y que cómo tales, acabarán abrasadas por la misma, por la luz que brilla sí, pero solo brilla para atraer no para dar calor, que tiene un olor apetitoso sí, pero solo para invitar a probar un néctar envenenado no para dulcificar y alimentar la vida. Te observo y pienso, ¿alguien se habrá atrevido a traspasar esa luz engañosa para ver lo que hay detrás de ella? ¿Alguien habrá dejado ese olor embriagador de lado para saber cual es tu verdadero sabor? No lo creo, es más fácil quedarse con la imagen de chico malo y libre que proyectas, que ver tu alma, porque quedándote en el muro levantado es más fácil para el otro hacerte culpable de todo lo que pasa mal, porque te es más fácil que te culpen y culparte tú mismo que alguien se pueda adentrar, te pueda entender y ver que en el fondo hay una añoranza, una debilidad un ansia.
Observo y observo, te siento, y profundizo, y veo que lo que tú llamas vivir libre, es reclamar que la muerte venga antes a por ti, es un suicidio lento, un no gustarte a ti mismo, un no saber amar, y cuando alguien no sabe amar es porque en el fondo no se ama a si mismo. Se alaba puede, se endiosa puede, pero aquel que más coronas se engalana, aquel que más reza a lo que ve, solo adora a una imagen, solo pone oro donde siente que está seguro de atacantes, que atraídos por ese poder se quedarán en esa superficie intentando robar el fulgor, intentando robar el poder, o aliarse con él, pero jamás se pararán a despreciar eso externo que tan prometedor parece para adentrarse donde está el verdadero tesoro, y quizás así te endiosas porque creas que no hay más tesoro escondido, que lo que hay no merece ser descubierto.
Veo que tu libertad solo son ataduras, te atas a tus vicios que te matan poco a poco, te atas a un matrimonio para no volver a vivir algo de vulnerabilidad, para no entregarte de nuevo si realmente te atrevieras y aprendieras amar, te atas a algo que llamas amor pero que solo es agradecimiento porque quizás es quien más cerca estuvo de descubrir, quien más aguantó tus arrebatos, tus malas costumbres y tu constante provocación para que te sigan tachando de malo, de alma libre y rebelde. Sin embargo, es más de lo mismo, el amor no es eso, alguien que aguanta según qué, no se ama, y por tanto tampoco puede amar, alguien que aguantara las cosas que hiciste solo tenía dependencia hacia ti, de la misma forma que tú has creado ahora una dependencia a ese ser, que curiosamente te ata y quieres quizás por temor a experimentar algo que no puedas controlar. La gente llama amor a muchas cosas que no lo son, y eso no era amor. Todo aquello que ate, todo aquello que te aleje, todo aquello que te cree melancolía, tristeza, dolor, nunca jamás se llamará amor. Será dependencia, necesidad, soledad, intereses, proyectos u objetivos que se pondrán un burdo disfraz de amor pero, ¿cómo podría doler el amor? ¿Cómo podría atarte el amor? ¿Cómo podría hacerte sufrir? No, si se dan estas características hablamos de desamor, nunca de amor.
Sigo observando e intentando leer entre líneas y descubrir el alma, porque el ser humano, ese veneno, ese envase, ese desapego y esa luz es algo superfluo, ese falso aire de libertad, esa imagen de rebelde empedernido, de suicida que desafía a la vida, es algo tan falso que se percibe en el aire, sin embargo, esa tristeza en tus ojos, esas frases entre líneas, esa melancolía, esa transformación y ternura cuando hay un niño, hablan de algo muy diferente a lo que proyectas, quizás un niño herido, asustado, vulnerable que no se quiere dejar salir, quizás el mejor de los tesoros que tú mismo desconoces y aún así rechazas.
Así cumples con lo que te imponen, todos esperan que seas malo, y al final cedes al aclamo, a fin de cuentas es lo que esperan de ti, tú les das lo que quieren. Todos esperan una reacción de ti que quizás en algún momento harían ellos mismos pero no lo hacen porque saben que no es correcto, y tú les das esa acción para que admiren tu libertad, esa admiración que te regocija unos segundos, pero luego buscas en los ojos y gestos esa desaprobación a la que estás acostumbrado, buscas esa afirmación de que eres un monstruo, y al mismo tiempo te alivia verlo porque es tu salvación.
El ver el horror en las caras, el juicio nefasto, la desaprobación es a lo que estás acostumbrado, es lo que quieres, pero al mismo tiempo te da tristeza y soledad que ahogas en vasos hepáticos, en humos de risas desneurados , en humos de niebla cancerígenos, que poco a poco te matan te hacen menos sabio y te debilitan, que te hacen desconectar momentáneamente de esas personas y mostrarles tu cara más divertida para que en el fondo te acepten o admiren, pero cuando llegas a tu cama, tú eres el que te censuras, ese desprecio en la cara de los demás te inunda te llena de dolor, de melancolía porque nadie te entiende, y tú eres el que eres más cruel en tu juicio hacia ti mismo, “no mereces la pena, todo lo que te ama, todo lo que se acerca, acabas destrozándolo. Mejor todo el mundo lejos, así todos estarán protegidos de mi”
Y ¿quién te protege a ti de ti mismo?
Amigo, porque así te siento aunque no lo entiendas, me da tanta pena que seas tan poco libre, me da tanta pena que tu sonrisa espectacular no llegue a tus ojos, me da tanta pena que lo que tú llamas vivir el momento a full, sea quemar los momentos, pasar sobre ellos sin vivirlos realmente sin implicarte, sin saborearlos, me da tanta pena que a la libertad llames atadura y las ataduras libertad, me da tanta pena que no te descubras y no dejes que te descubran, me da tanta pena que llames amor a lo que no lo es, y que digas que te aman los que no te aman, me da tanta pena tus barreras y que teniendo alas de águila te quedes en gorrión, me da tanta pena que quieras seguir atado a un nudo que te ahoga solo como forma de castigo por el daño que haces.
Sin embargo, amigo, hay una esperanza en ti, es evidente que estás intentando superarte, eso ya rompe los esquemas del niño malo, aunque seguirán personas recordándote quien eres, pues en el fondo tu superación es una patada en el estómago de ellos que no supieron ver más allá de esa imagen, que se refugiaron en ella para decir, “yo hago las cosas bien, tú eres el problema” porque compararse con alguien que creemos peor es poner bálsamo en nuestras heridas. Y no interesa que los niños malos dejen de ser malos pues ¿cómo entonces seríamos mejor que alguien? El mundo es así de competitivo y absurdo.
Atrévete amigo a seguir por ese camino, e indaga, indaga dentro de ti. Atrévete, a llamar a cada cosa que sientes por su nombre, no le pongas palabras falsas de lo que te gustaría que fuera, como a tu falta de libertad le llamas libertad, porque eso te impedirá el avance. Si no amaste di no amé, pero necesité, no por eso soy malo aunque lo haya hecho mal, y buscaste excusas para tirar la toalla para decir que se había acabado algo que realmente nunca había existido, y si abandonaste todo porque en esos momentos no te sentías capaz no culpes a las circunstancias a las que te llevo la vida sino asume que tú buscaste esas circunstancias en cierta medida para tener una excusa para abandonar, en vez de decir, no me siento capaz. Si no te amaron pero te adoraron, acepta que no te amaron no eres mejor o peor persona según te amen el resto, sino según te ames tú. Solo así serás libre, solo así experimentarás la vida, la vida a full, amarás como nunca soñaste y si hay suerte te amarán como nunca te amaron y llamarás libertad a lo que es libertad, y los símbolos no te parecerán ataduras sino sinónimos de libertad, de algo que has elegido a pesar de tu imagen de duro empedernido.
Sé que alguien lo intentó, alguien que ya no está, alguien que veía más adentro de esa imagen, alguien que no le gustaba nada tu imagen que tanto adora esta sociedad, y que no quería que invadiera tu tesoro interior, que no quería que lo hiciera desaparecer, por eso pugnaba, por eso se empañaba por eso intentaba de forma quizás poco acertada sacar lo que su amor sí veía, ese tesoro que amaba y que le encantaba, quería hacerte ese hombre de bien que él veía, porque realmente te quería, pero a veces, solo a veces, el miedo a que desaparezca lo que intuimos que hay, hace que en vez de demostrar amor y comprensión para ayudar a sacar lo que amamos, mostremos desprecio hacia aquello que sabemos que no es, porque creemos que así aflorará el verdadero ser que se esconde temeroso.
Yo sé que eres difícil, sé que no eres aconsejable, sé que no soy yo quien va a destruir esa fachada, sé que no soy yo quien te va a dar libertad, ni quien va a demostrarte que ese tesoro que guardas dentro y que temes, brilla mucho más que lo engañoso que muestras a las personas, no soy yo quien te va demostrar que es mejor vivir aunque pierdas, que por miedo a perder alejes todo de ti, no soy yo quien estaré a tu lado para darte solo una mano sin palabras cuando empieces a descubrir tu potencial y quizás te desconcierte al principio cuando los de alrededor no acepten quien realmente eres, no soy yo la que estaré allí para frenar ese suicidio lento y poco fructífero, ni en la que confíes, ni ames, ni temas, ni añores. No seré yo tu mejor amiga, aunque sé que seríamos buenos amigos porque confío en quien eres y me encanta. Yo solo seré como una breve luz que pasa por tu vida sin darte calor, y a la que probablemente quieras apagar, seré como una brisa sin aire que nunca te pertenecerá, que no añorarás y que un día no muy lejano alejarás porque no seré necesaria. A pesar de ello, aquí estoy porque yo confío en ti, porque tu imagen no me impacta, porque tengo antídoto ante tu veneno, porque tu olor no me embriaga, porque tu luz no me ciega.. Aún así sabiendo de antemano tu huida, confío tanto en tu interior y sé que lo vas a lograr, y aunque posiblemente no lo vea, sabré que estás bien, que lo habrás conseguido y me sentiré orgullosa de ti.
No sé por qué te estoy escribiendo, ni siquiera por qué te tiendo una mano sabiendo que la vas a morder, no sé qué me empuja a dirigirme a ti, ni por qué lo intento sabiendo que desaparecerás de mi vida como entraste, no sé de dónde viene este impulso ni por qué el destino nos unió, no sé si tuvimos una vida pasada juntos y por eso parece que te conozca de siempre que conozca tu alma, no sé por qué lo hago sabiendo que quizás me odies. No lo sé… pero estoy aquí escribiéndote con el corazón encogido intuyendo tu explosión de furia o de tristeza, que quizás rompa el débil lazo, pero aún así una fuerza me empuja a intentar que REALMENTE VIVAS.
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En Buenos Aires (Argentina), hay un matrimonio que lo está pasando realmente mal. Si pudieras echar un cable, no sé si se te devolverá el bien en esta vida,lo único que sé es que los seres humanos necesitamos unos de los otros, que hoy lo necesitan ellos, y quizás mañana nosotros, solo por eso, solo porque a todos nos gustaria que nos ayudaran, no te olvides de los que lo están pasando mal cuando tu vida va bien. Si alguien puede ofrecer trabajo, o cualquier cosa que sirva para cambiar la situación de este matrimono de Argentina, por favor, vayan al link que pongo abajo. Irlanda puede ofrecer clases de inglés, si sus hijos no van bien en la materia, si algún centro necesita profesor, si alguna empresa necesita una persona que hable inglés. Pónganse en contacto con ellos. Si saben de algún puesto para Marcial o Irlanda, si tienen posibilidades, si se les ocurre alguna idea, alguna forma de cambiar esta situación, ayuden porque no hay nada más lindo que dibujar una sonrisa en la cara de un ser humano, ni nada más gratificante que dar una esperanza. Para entender de que hablo, vayan a este link: http://marcialcandioti.wordpress.com/2009/02/23/ayudennos-nuestra-ultima-esperanza/ si van a la página, recuerden que ahora mismo se encuentra en Buenos Aires, intentando encontrar allí alguna solución. Así que si pueden ayudar, antes de hacer nada, pónganse en contacto con ellos porque el link es de cuando estaban en Merlo, pero creo es importante se lea para entender la situación. SE LES HA OCURRIDO UNA MUY BUENA IDEA PARA COMPENSAR. A CAMBIO QUIEREN DAR ALGO A TODOS. PASEN POR ESTA NUEVA PÁGINA DE MARCIAL E IRLANDA Y LEAN DETENIDAMENTE http://fotosunicas.wordpress.com/2009/03/07/sobrevivir/ Gracias por anticipado.
Artículo de Lucía Etxebarria publicado el 18 de Mayo de 2009 en ADN: ( 
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